Aunque la ley obliga a la DGT y a todos los organismos con competencia de tráfico a notificar las multas, hay ocasiones en las que realmente no sabemos que hemos sido sancionados: no estábamos en el domicilio en ese momento, la dirección de nuestra casa no está actualizada en los ficheros de la Administración, etc. Entonces, ¿cómo saber si tengo multas de tráfico? Aquí te explicamos dónde puedes conseguir esta información y qué hacer para pagarlas a tiempo y con reducción.
En líneas generales, hay dos maneras de solicitar esa información:
- Presencialmente: en las Direcciones Provinciales de la DGT, el el Departamento de Tráfico del Gobierno Vasco, en el Servicio Catalán de Tráfico o en las oficinas de atención al ciudadano de los municipios que tengan competencias de tráfico.
- Online: existen algunos portales web que brindan esta información, ya pertenecientes a dichos organismos o a compañías de seguros.
Páginas web donde saber si tengo multas de tráfico
El portal de referencia para conocer esta información sobre multas de tráfico es TESTRA (Tablón de Edictos de Tráfico). Se trata de un portal público en el que se recopilan los edictos de la Dirección General de Tráfico, sus equivalentes vasco y catalán y muchos ayuntamientos de España. Se puede consultar de dos maneras:
- Sin Certificado Digital: se consulta la información a través de un motor de búsqueda estándar, donde se puede introducir el número de matrícula, el nombre del conductor, la fecha y otros términos de búsqueda similares.
- Con Certificado Digital: más recomendable porque la solicitud de información va ligada directamente a la persona, evitando errores de tipografía en los términos de búsqueda.
No obstante, hay que tener en cuenta que no todos los ayuntamientos se han incorporado al TESTRA, por lo que puede darse la circunstancia de que tengamos una multa emitida por un municipio pero no aparezca reflejada en el TESTRA. Por ello, recomendamos consultar también los portales de información de tu ayuntamiento o de los ayuntamientos por los que sueles circular, para comprobar más específicamente esta situación.
Además de la DGT y los ayuntamientos, muchas compañías de seguros ofrecen el servicio de tramitación de multas, y ahí se incluye la consulta de edictos. Por ello, estas aseguradoras suelen tener una página web en la que también se brinda esta información, aunque en realidad no es un banco de datos propio sino una web que realiza esa búsqueda en los portales de tráfico mencionados.
¿Qué hacer para no pagar o pagar menos?
Una vez que la multa está emitida y notificada, lo que desea cualquier ciudadano es eximirse de pagar el importe. Para ello, las propias compañías aseguradoras, despachos de abogados o compañías comerciales ofrecen diferentes servicios para recurrir multas. En esos recursos se intenta alegar, dentro de la legalidad, situaciones que anularían la multa: errores en el procedimiento de notificación, errores en el momento de la emisión, errores de identificación del infractor, etc. En algunos casos, estos recursos prosperan. En otros muchos, no.
Y cuando ese recurso no prospera, lo que queda es pagar menos, es decir, acogerse a una reducción del importe. Todas las multas informan de dos plazos: el de plazo de pago de la multa y el periodo de importe reducido o voluntario. Dentro de este último periodo, el importe a pagar suele ser del 50% del total.
Conviene recordar que no es recomendable dejar pasar estos plazos, a no ser que la multa esté recurrida y el abogado nos aconseje no pagarla todavía. De lo contrario, se inicia un procedimiento sancionador que, en el peor de los casos, nos hará pagar un 20% de recargo con respecto al importe total de la multa, a lo que habría que sumar intereses de demora y otros gastos asociados. Además, los departamentos de tráfico, en colaboración con los de Haciendo y Economía, disponen de las herramientas para iniciar procesos de embargo de nuestras cuentas, por lo que un día nos podemos encontrar en el extracto bancario que las administraciones ‘se han cobrado’ ellas solas la multa y los intereses.
Cómo pagar la multa en situaciones de dificultad
Nadie está a salvo de que, aún teniendo la voluntad de pagar la multa, no podamos hacerlo por estar atravesando un momento de dificultad: no hemos cobrado la nómina a tiempo, se han juntado varios gastos inesperados o cualquier otro motivo de este tipo. En esos casos, es posible solicitar un aplazamiento o un fraccionamiento de la multa, aunque eso solo es posible para cantidades altas y para multas que ya han entrado en periodo ejecutivo por vía de apremio, es decir, cuando Hacienda ya ha comenzado las gestiones para el embargo. En cualquier caso, la solicitud de ese aplazamiento o fraccionamiento está sujeto a trámites burocráticos largos y complejos.
Una alternativa a ello es pedir un préstamo urgente a través de Internet, como los que ofrece Credy.es. Dado que el importe máximo a solicitar es 750€ y la concesión es rápida, sale mucho más rentable solicitar uno de estos créditos online inmediatos que dejar vencer el periodo de pago voluntario con reducción.